Después de jugar contra Ecuador, Entre Dos en exclusiva con Álvaro González.
Habló sobre el partido, la selección y su vida personal.
¿Cómo se vivió el partido contra Ecuador?
-Se vivió con un poco de nerviosismo por el gol que recibimos en seguida de comenzado el partido. Eso altera los nervios, se contagia un poco la ansiedad por encontrar rápido el empate y por intentar hacer bien las cosas.
No terminamos haciendo un buen partido y
lamentamos los puntos que perdimos.
¿Creés que la selección está fallando en
algo?
-No jugamos bien en Barranquillas; con Ecuador se repitió esa
situación aunque ahora en condiciones más normales. Es un partido más para
analizar y para corregir. En Barranquillas habían otras condiciones
extras que no permitieron un buen desempeño, pero contra Ecuador se falló.
Hay cosas que corregir pero somos los
mismos jugadores que hasta hace poco conseguimos muy buenos resultados, así que
se puede decir que fue simplemente un mal partido. Con la autocrítica de las
cosas que se hicieron mal, pero con confianza para lo que viene: tratar de
sumar los puntos que perdimos en estos dos partidos de eliminatorias.
En cuanto a lo personal, ¿Qué hacés antes
de un partido? ¿Sos nervioso, sos tranquilo…?
-Sí, un poco
de nervios siempre hay y es bueno tenerlos para entrar con la máxima
concentración. Siempre hay que esperar encontrar un rival duro. Es bueno estar
un poco nervioso pero a la medida que avanza el partido uno se tranquiliza.
Yendo al estadio empiezan los nervios, pero ya con varios años de carrera lo
vas manejando mejor.
¿Te imaginabas que un día ibas a estar
jugando en la selección?
-No, hasta que no tuve la salida de Defensor a Boca, me costaba
pensar que podía estar tantos años en la selección, jugando, por suerte, la
cantidad de partidos que vengo jugando con este proceso de Tabárez.
Sí lo soñaba, porque todo niño que corre
atrás de una pelota, sueña con algún día ponerse la camiseta de Uruguay, lo
soñé y por suerte llegué a cumplirlo.
¿Qué sentís cuando miras para atrás y ves
el crecimiento que has tenido en tu carrera?
-Orgullo; agradecimiento también a todas las personas que me han
ayudado, si bien yo soy el que sale a la cancha y voy a los entrenamientos, seguramente
tiene mucho que ver la gente que está atrás mío. Tengo una familia que siempre
me ha apoyado. Nada es fácil y el fútbol no es la excepción, costó mucho llegar
a donde estoy.
¿Sentís diferencia entre jugar en la
selección y jugar en Lazio?
-Sí, es diferente porque los torneos y las competiciones son
diferentes. Además por la responsabilidad que se tiene al jugar por su país;
por tantas personas que están atrás de uno. Si bien el equipo tiene su
hinchada, no es lo mismo, no se vive de la misma forma. Quizás lo otro se
vive más como un trabajo y esto se vive como una oportunidad de defender a tu
país. Es una responsabilidad y una presión más importante.
¿Cómo te trata la gente en la calle? ¿Te saluda, te reconoce?
-Si acá en Uruguay con las cosas que hemos logrado la gente
reconoce el esfuerzo que hemos hecho con todos los muchachos de la selección.
Ojalá podamos seguir dándole alegría a la gente.
¿Qué actividades tenés o te gusta hacer
fuera del ámbito futbolístico?
-Cuando tengo la oportunidad de estar en Uruguay me gusta compartir
lo más que puedo con mi familia y amigos, son pocos los momentos que tengo y
trato de aprovecharlos de esa manera.
¿Por qué te dicen Tata?
-Me lo puso un compañero en juveniles, por la voz ronca. Me puso
así porque dice que tengo la voz como un abuelo, y bueno, me quedó Tata.
¿Qué querías ser cuando eras chico?
-Jugador de fútbol. Siempre.
¿Qué pensás que estarías haciendo hoy, o
cómo sería tu vida si no fueras jugador de fútbol?
-Estudiando.
No era que le disparaba a los libros, me
gustaba estudiar y obviamente iba a hacer algo relacionado con el deporte.
Seguramente educación física.
¿Qué música te gusta?
-De todo, principalmente la cumbia porque me gusta bailarla, pero
me gustan todos los géneros.
¿Sos de salir a bailar?
-Siempre que puedo.
¿Qué te gusta más, la noche italiana o la
uruguaya?
-La uruguaya.
¿Por último, y de mucho interés para las
chicas ¿Tenés novia?
-(Se ríe a carcajadas y contesta:) sí, tengo sí.
Por : Milena Giménez Lema
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